Cuando amar no es suficiente (y nadie te enseña por qué)
Ella era intensa, apasionada, entusiasta.
Él también.
Dos fuegos juntos, al principio, brillaban como un sol.
Todo era conexión, deseo, emoción.
Sexo del bueno. Mucha pasión.
Hasta que empezaron los roces.
Ella necesitaba hablar. Él también.
Pero no se escuchaban. Solo chocaban.
Discutían por tonterías. Se culpaban de todo.
Ambos querían tener razón. Ninguno sabía cómo ceder sin sentirse débil.
Y el amor se volvió un campo de batalla.
No porque no se quisieran.
Sino porque no sabían cómo amarse desde lo que eran.
Nadie les enseñó que una energía dominante necesita dirección, no control.
Que cuando dos personas quieren liderar sin escucharse…
no hay proyecto de pareja que sobreviva.
A menudo las relaciones no se acaban por amor, se acaban por la comunicación.
Porque se desconoce como comunicarse con la pareja.
Cada uno de ellos habla un idioma.
Cada persona es única y reacciona de una manera ante el conflicto.
Por eso, cuando nos conocemos energéticamente, podemos entender como reaccionamos y como reacciona nuestra pareja.
También, que necesita en ese momento, porque seguramente, no sea lo mismo que necesitamos nosotros.
¿Te ha pasado?
¿Relaciones que se rompen sin entender el porqué?
No se trata de amor. Se trata de energía.
Y de aprender a relacionarte desde tu verdad… y la del otro.
Las relaciones de pareja son algo demasiado importantes que afectan tanto en lo personal como en lo profesional.
Por eso, es esencial, conocer como eres y como te comportas en esta esfera de tu vida.
Por eso digo, que Dominar tu energía te permite dominar tu mundo.
Creo que deberías mirar aquí:
Un abrazo
Luis
PD: Esta historia es más real de lo que parece. Y por eso la cuento. Porque nos pasa. Pero también se puede cambiar.
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