No sé si has tenido alguna vez esa sensación de que lo que estas haciendo no es algo que va contigo.

De que es algo ajeno.

Un día empezaste con tu negocio y al día siguiente lo que sientes no se parece en nada a lo que habías pensado. Soñado.

Y te ves tan lejos de eso que haces día a día que la motivación no es que esté por los suelos, es que ni existe.

Esto que te acabo de escribir es como muchas personas se sienten cuando manejan un negocio que no tiene que ver nada con ellos.

Lo montaron con un poco de allí y un poco de allá.

Una estrategia del gurú de turno y otra que vieron en Youtube.

Después cambiaron algo porque lo vieron en Instagram.

Tienen un sistema de ventas que aprendieron en un curso con un tío que no vende ni agua en el desierto.

Su pareja le dijo que hiciera otra cosa que vio en internet. Su pareja no sabe nada de su negocio, pero también opina. Faltaría más.

Y la prima. Que no falte la prima que hace sus cosillas de marketing.

Y la amiga. Esa que le dice: "tía vales para todo, tu puedes"

Y así se montan negocios.

Con un poquito de aquí y un poquito de allá.

Pero sin un mucho de uno mismo.

Se olvidan de lo principal. De cómo es quien dirige el negocio y montan algo sin alma, sin conexión.

Mira, si tienes un negocio o quieres tenerlo lo más importante eres tú.

Como tú eres, como es tu energía, tu vida y tus circunstancias.

Las estrategias, los logos y los colorines vienen después.

Primero tú, así se construye un negocio que no lo sientas ajeno.

Así, lograrás vender, primero conectando contigo y después con la clientela.

Si no sigues ese orden, mal vas.

Si tienes un negocio, creo que deberías mirar aquí:

TU NEGOCIO

Un abrazo

Luis

Sensación de estar desconectado de tu propio negocio