Sentirse pequeñita

La mayoría de personas con las que he trabajado al principio se sentían pequeñitas.

Sin embargo yo les veía potencial para sentirse grandes.

Es curioso como nuestra mente nos diseña nuestro camino en la vida en base a las creencias.

Y así te ves, así te atreves.

Y así te atreves, así es tu vida.

Esto es algo que veo cuando acompaño con las mentorías a nivel profesional y personal. Aunque es algo que he visto desde siempre.

Hace unos añitos presencie una escena en la que una chica estaba llorando. Tendría unos 16 años. Era la hija de una amiga.

Al parecer le gustaba un chico y ella no se sentía lo suficientemente guapa como para aspirar al jovencito.

Cuando miraba a la chica no llegaba a entender la situación porque a mi parecer podría tener a cualquier chico de su edad a sus pies. Conozco a los chicos de su edad. Yo pasé por ahí.

Era muy guapa y llamaba mucho la atención.

Sin embargo estaba llena de complejos no sé muy bien porqué.

No mucho tiempo después supe quien era el chico.

La diferencia era tal, que cada vez entendía menos a la chica.

No te voy a decir que él era para mostrarlo en los circos y darle de comer cáscara de sandía, pero por lo menos para llevarlo con correa si que era.

Dos personas. Dos maneras de verse. Dos maneras de sentirse. Porqué a él se le veía confiado. A ella no. Se sentía pequeñita.

Soy hombre y estoy seguro que esa chica podía tener a cualquier chico de su edad comiendo en la palma de su mano.

Si hay algo que me motiva en mi día a día es sacar todo ese potencial que tienen las personas.

Y si hay algo que me jode es que no saquen ese potencial.

No es cuestión de regalar el oído.

Así no crecen las personas.

Crecen cuando se conocen, cuando se aceptan y cuando se aman.

Porque no puedes confiar en ti si no te amas.

Y no te puedes amar si no te aceptas.

Y no te puedes aceptar si no te conoces.

Ese es el gran problema; la mayoría de personas no se conocen.

Cuando es el primer paso.

¿Cuánto crees que puedes conseguir y todavía no estas consiguiendo?

Te respondo;

"lo que tú te propongas"

¿Y si charlamos?

Vemos que deseas conseguir. Hablamos. Te escucho. Y el futuro dirá.

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Un abrazo

Luis