¿Has bailado alguna vez la canción infantil, taza, tetera, cuchara, cucharón, plato hondo...?
Si tienes niños seguro.
Si te gusta la fiesta, las verbenas o fiestas de pueblo también.
Y, seguro, que te has sentido bien.
Te alegras, bailas, sonríes.
Incluso, si tienes la coordinación y el duende de Mariano Rajoy, te lo pasas bien.
(otro día te hablo de Paquito Chocolatero)
Te cuento esto, porque habrás visto muchas convenciones de gurús que tienen la fórmula de la felicidad.
Te ponen a bailar y a dar palmas.
Te motivan.
Te ponen música y das giros y piruetas para que vibres en la misma onda que el universo y este, conspire para ti y te lo de todo.
Aprietas los ojos fuertes (sin cagarte) y el universo por ser tú, un ser especial y único, te lo va a dar todo.
Pues eso, es lo único que se consigue con esas reuniones y pagando un dineral, que lo pases bien cómo cuando bailas en la feria de un pueblo.
A no ser que pienses, que el universo no tiene otra cosa que hacer, que darle abundancia y felicidad a cuatro gilipollas en una convención que han pagado 800 €.
Mira, el universo tiene bastante con lo suyo, con sus agujeros negros, sus galaxias y sus enanas blancas, y por mucho que te cuenten, no tiene un plan especial para ti, cuanto antes lo asumas mejor.
Te digo esto, porque la pretensión de Cartas para Martina que publico los domingos es que tu vida sea un poquito mejor poco a poco.
Porque los grandes cambios no se producen en un fin de semana, a no ser, que, el predictor dé positivo.
Los grandes cambios, se producen poco a poco.
Sólo pretendo, provocar algo, que cambie a mejor tu vida.
Sólo pretendo, que, con ideas sencillas y prácticas, entiendas mejor la vida y tu proceso vital.
Sólo eso, provocar algo, no sé muy bien, pero provocar que sonrías un poquito más, seas un poquito más feliz y que poco a poco, tu vida sea más sencilla.
Sólo y nada más que eso.
Bien, en la historia del domingo, te voy a contar cómo hace años entendí algo que entienden los astronautas cuando salen del universo.
Yo no necesite una nave espacial, solo unas copas y un porro.
Porque cada uno viaja como quiere.
Así, que el domingo, una historia, una lección y una práctica.
Aquí para recibirla y tener acceso a todas las Cartas publicadas.
Un abrazo
Luis
PD: 9€/mes es lo que te puede costar pagarle una línea de móvil a tu amante, con tarifa plana.