El email de ayer no dejó a muchas personas indiferentes, dado que me escribieron varias mujeres.
La mayoría me dieron la razón. Aunque esto no va de tener la razón, sólo describía la realidad.
Y hubo dos suscriptoras que decían que sí, pero que ellas ahora no.
Es decir, que casi siempre sí, pero que ahora no.
Es decir, que ellas antes en la mañana eran cómo una “manta mojá” y ahora por las mañanas, pues encantadas de la vida que le hagan la cucharita con el extra de regalo.
Ellas contentas y ellos contentos, que bonita es la vida.
Y esto puede tener relación con otras cosas, cómo la etapa de la relación en la que se está, la edad, la menopausia, anticonceptivos, la ovulación etc.
Dicho esto, el domingo publico una nueva Carta para Martina.
No te hablaré de posturas sexuales, ni del secreto de la sexualidad taoísta, no te hagas ilusiones.
Enlazaré una historia real, con una enseñanza taoísta para que aprendas los ciclos naturales y te conozcas mejor.
Para que aprendas a fluir con tu naturaleza y entiendas que hay días para todo, pero que no puedes con todo, todos los días.
No es la única clave de la felicidad, pero si te diré, que la plenitud pasa por aceptarse y dejarse llevar, por fluir con la vida, por cómo te sientes y cómo eres.
No vayas contra tu naturaleza, porque te estarás chocando contra un muro. Y los muros, suelen estar duros.
Y, ya sé que mejor duro que blando, pero chocarse con los muros, no te hará más feliz.
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Un abrazo,
Luis